La provincia de Alicante, reconocida por su turismo de sol y playa, es también un enclave con un rico patrimonio cultural. Entre sus joyas menos conocidas, pero no por ello menos importantes, se encuentra el yacimiento arqueológico de La Cova de l’Or, ubicado en las montañas de Beniarrés, en el interior de la región.
En este post exploraremos juntos los rincones de esta joya arqueológica, desvelando los misterios que ha guardado a través de los milenios y descubriendo por qué la Cova de l’Or es un lugar que deberías visitar en la provincia de Alicante. ¡En Marcha!
La Cova de l’Or, conexión con el pasado
La Cova de l’Or en Beniarrés es un yacimiento arqueológico situado en el interior de una cueva cuya entrada se ubica a unos 700 metros de altitud, en la vertiente sur de las estribaciones de la Serra del Benicadell. Esta cueva no es solo una maravilla natural, sino también un lugar clave para entender el Neolítico valenciano.
La Cova de l’Or —»cueva del oro» sería la traducción al castellano—, más allá de ser un atractivo turístico declarado Bien de Interés Cultural, representa una conexión profunda con las raíces históricas y culturales de la Comunidad Valenciana. Pero lo que realmente despierta la curiosidad de visitantes y expertos por igual son los enigmas que aún envuelven este lugar. ¿Qué secretos ancestrales yacen ocultos en sus profundidades? ¿Qué historias aún no contadas pueden revelar las paredes de esta antigua cueva?
La Cova de l’Or no solo invita a un viaje a través de la historia, sino también a una aventura en busca de misterios por descubrir, evocando los susurros de un pasado que todavía resuena entre las sombras de la cueva, esperando ser explorado…
Yacimiento de la Cova de l’Or de Beniarrés
El descubrimiento de La Cova de l’Or en la década de los 30 del siglo XX abrió una ventana al pasado prehistórico de la región valenciana. Las excavaciones realizadas en este yacimiento han desvelado una ocupación humana que se remonta al Neolítico, proporcionando una valiosa información sobre las primeras sociedades que habitaron estas tierras.
A través de los hallazgos de herramientas, cerámicas, enseres, restos óseos y evidencias de actividades cotidianas, la cueva ha sido reconocida como un lugar de gran importancia para entender el desarrollo humano en la península ibérica.
Las cerámicas de la Cova de l’Or
Los descubrimientos realizados en la Cova de l’Or, en Beniarrés, aportan pruebas significativas sobre la vida durante el Neolítico Antiguo (5500-5000 a.C.). Esta cueva fue un lugar ideal para vivir en aquella época. Lo que más destaca son los restos de semillas de trigo y cebada, evidencia de las primeras prácticas agrícolas de la época. Los hallazgos sugieren también que la cueva y sus alrededores fueron escenarios de ceremonias y rituales.
En particular, las piezas de cerámica halladas en la cueva son notables. Están decoradas con impresiones hechas con conchas (estilo cardial) y a menudo muestran figuras humanas en posturas que sugieren oración o danza. Esta alfarería es parte del Arte Macroesquemático y conecta la Cova de l’Or con otros importantes sitios de arte rupestre de la misma cronología, como La Sarga en Alcoy o el Pla de Petracos en Castell de Castells. Esto indica que la Cova de l’Or podría haber sido parte de un ciclo ritual relacionado con estos importantes centros de reunión y celebración.
Visitas guiadas a la Cova de l’Or de Beniarrés
Reconocida como un Bien de Interés Cultural, la Cova de l’Or fue musealizada por el MARQ, Museo Arqueológico de Alicante, entre los años 2016 a 2020. En la actualidad está abierta para visitas guiadas.
La experiencia comienza en el Centro de Interpretación en Beniarrés, donde los visitantes se sumergen en el contexto histórico y cultural del yacimiento. Aquí puedes aprender sobre el trabajo y las investigaciones que han permitido abrir esta cueva al público.
Posteriormente, se traslada a los participantes en minibús hasta el inicio del sendero que conduce a la cueva, el cual debe recorrerse a pie. Esta caminata, de alrededor de 1 kilómetro de longitud y 100 metros de ascenso, se realiza en aproximadamente media hora; aunque no excesivamente difícil, es una experiencia en sí misma, ofreciendo vistas impresionantes del valle del río Serpis y de la Sierra del Benicadell.
Una vez en la entrada de la cueva, los visitantes se equipan con un casco (proporcionado por los guías) y participan en una visita interpretativa. Los guías explican detalladamente los aspectos más relevantes del yacimiento. La experiencia es inmersiva, permitiendo a los visitantes no solo aprender sobre la historia y la arqueología del lugar, sino también experimentar la sensación de estar en un sitio que fue testigo del desarrollo humano durante miles de años.
Horario Visitas Cova de l’Or
El horario para visitar La Cova de l’Or de Beniarrés se establece los sábados y domingos, desde las 9:00 hasta las 14:00 horas. Cada grupo que participa en la visita guiada está limitado a un máximo de 15 personas, asegurando así una experiencia más personalizada y detallada.
Para participar en estas visitas, es necesario realizar una reserva con antelación, que se pueden hacer a través del portal web www.marqalicante.com, enviando un correo electrónico a info@marqalicante.com o covadelor@marqalicante.com, o llamando al teléfono 965 14 90 00.
Las reservas deben realizarse al menos una hora y media antes del inicio de la visita. Sin embargo, para las que se realicen en la primera hora de la mañana, el plazo de reserva finaliza media hora antes del cierre del servicio de taquillas del día anterior.
En caso de que haya plazas disponibles al inicio de la visita, se ofrecerá la oportunidad de unirse a la visita in situ, completando así el grupo hasta el máximo de 15 personas. Para estas situaciones, se habilitará un sistema de pago directo en el Centro de Interpretación, donde el guía responsable de la visita gestionará el proceso.
La tarifa para las visitas guiadas es de 3 euros para escolares (Bachillerato, Secundaria y Primaria) y de 5 euros para el público general.
La visita a La Cova de l’Or en Beniarrés es más que un simple recorrido turístico, es una oportunidad única de conectar con un pasado que sigue vivo en las piedras y en las paredes de esta antigua cueva. Representa una faceta diferente de Alicante, una que va más allá de sus reconocidas playas y su vibrante vida nocturna. Es un viaje en el tiempo, una oportunidad para reflexionar sobre nuestra historia y sobre aquellos que nos precedieron. Visitar este lugar es una experiencia inolvidable que deja una huella imborrable en el corazón y en la mente de quienes tienen la fortuna de explorarla.
